En ocasión del primer aniversario del colapso del edificio Rana Plaza, que mató a más de 1.100 trabajadores, Houngbo, dijo: “El Rana Plaza fue una tragedia para Bangladesh. Pero también fue una tragedia mundial, que sacó a la luz los problemas que afectan a millones de trabajadores, empleadores, marcas y consumidores. Es decir, toda la cadena de aprovisionamiento”.
Houngbo señaló que la tragedia fue un llamado a favor del cambio, que súbitamente acortó las distancias entre los consumidores en las economías desarrolladas y los trabajadores que confeccionan sus prendas de vestir.
“Me complace poder decir que el cambio está ocurriendo. Durante los últimos doce meses, se han realizado progresos significativos para mejorar las condiciones de trabajo y para garantizar los derechos de los trabajadores en Bangladesh”, agregó.
Gilbert Houngbo se refirió también a las iniciativas internacionales emprendidas por los compradores y los distribuidores internacionales.
“El Acuerdo y la Alianza son compromisos sin precedentes para hacer que las fábricas que les suministran sean más seguras”, indicó.
La OIT ejerce la presidencia neutra del Acuerdo, el cual reúne a más de 150 marcas y distribuidores internacionales que tienen proveedores en Bangladesh, y dos sindicatos mundiales (IndustriALL y UNI Global). En total, el Acuerdo abarca 1.639 de las 3.498 fábricas de Bangladesh que confeccionan prendas de vestir para la exportación. La Alianza está constituida por 24 marcas y distribuidores de América del Norte; abarca a otras 770 fábricas aproximadamente.
Próximos desafíos
Si bien comenzaron los pagos de las indemnizaciones a los sobrevivientes y a las familias de los trabajadores que fallecieron en el Rana Plaza, Houngbo señaló que sería inaceptable que todas las quejas legítimas no fuesen respetadas.
“Exhorto a todas las partes interesadas a que asuman sus responsabilidades y garanticen que la meta del Fondo de indemnización sea alcanzada”, agregó.
El Director General Adjunto de la OIT dijo que urge una mejor preparación en el caso se produzcan otros accidentes en el lugar de trabajo a través del establecimiento de un sistema de seguro para las lesiones en el lugar de trabajo en Bangladesh.
“Deben ser instaurados mecanismos sostenibles que garanticen que la indemnización pueda ser resuelta de manera eficaz y equitativa”, afirmó.
Houngbo, dirigiendo la atención hacia los desafíos que nos aguardan, dijo: “Todos nosotros sabemos que el cambio no ocurre fácilmente pero las dificultades no deberían disuadirnos de hacer lo necesario para garantizar que el sector de la confección de Bangladesh sirva de catalizador para un cambio sostenible en el país y en todo el mundo”.
“Todas las partes interesadas deben unirse para trabajar de manera concertada, ninguno de nosotros puede lograrlo por sí solo”, concluyó.
Más información sobre el trabajo de la OIT en relación al sector de la confección en Bangladesh puede ser consultada en: http://www.ilo.org/rmg-bangladesh
