Carpinteros, afiladores, ebanistas, aserradores… se ven expuestos con mayor o menor intensidad en su trabajo diario a diversos riesgos y, para evitarlos, además de la preceptiva evaluación de riesgos laborales, DEINSA señala la importancia de una correcta selección de EPIS para los trabajadores del sector de la madera.
Así, y en función de la parte del cuerpo que sea necesario proteger, los equipos de protección individual más adecuados habrán de ceñirse a las siguientes características:
Protección de los pies
Se empleará un calzado de seguridad S, el cual responde a una serie de características ergonómicas, además de cumplir una serie de requisitos básicos tales como que protege los dedos al impacto o la compresión, su lengüeta y el forro son resistentes al rasgado, la suela es resistente además a la abrasión, etc.
Este tipo de calzado puede ser de clasificación I (tipo cuero) o de clasificación II (tipo caucho) pero, en cualquiera de los casos, habrá de cumplir con la Norma EN ISO 20345 sobre calzado de seguridad para uso profesional, equipado asimismo con una puntera que ofrece protección a impactos de hasta 200J.
Protección de manos
Contra posibles accidentes a consecuencia del uso de máquinas, son imprescindibles los guantes de protección contra riesgo mecánico que se ajusten a la Norma 388. Y para el caso de los lacadores, resulta imprescindible igualmente el uso de guantes pero en su caso ajustados a la Norma EN 374 de protección contra riesgo químico.
Protección de los ojos
La vista queda también en una posición de vulnerabilidad fundamentalmente en el transcurso del trabajo con máquinas, momento en que no es infrecuente que salte alguna chispa o una astilla. Para evitar esta posibilidad es recomendable emplear gafas de protección, como mínimo de clasificación F de bajo impacto y más convenientemente gafas anti-proyecciones contra impactos que respondan a la Norma EN 166.
Protección respiratoria
El polvo que genera el trabajo con maderas duras es potencialmente cancerígeno. Por este motivo es muy importante el empleo de mascarillas de nivel P3 de máxima protección que protejan al trabajador de su inhalación, según la Norma EN 149. Si bien a éstas no se le pueden incorporar filtros tipo A o AX, a las máscaras completas y a las semi-máscaras sí que es posible, además de muy recomendable en caso de la existencia de vapores orgánicos.
Protección auditiva
Y, para terminar, y contra el ruido que puedan generar las máquinas empleadas en el procesado de la madera, es recomendable emplear tapones u orejeras que se ajusten en este caso a la Norma EN 352-2 y En 352-1, respectivamente. El criterio para elegir una modalidad u otra sea tal vez la frecuencia con la que el trabajador tiende a retirarse la protección auditiva en el transcurso de su trabajo. Si lo hace a menudo, es conveniente usar orejeras, de lo contrario, el empleo de tapones es más efectivo.
DEINSA, empresa especialista en protección laboral desde 1987, recuerda la importancia del empleo de los EPIS adecuados en el sector de la madera como prevención en salud y para evitar algunos de los accidentes más frecuentes en este sector y que pasan por caídas a distinto o al mismo nivel, golpes y quemaduras, además de cortes y atrapamientos con sierras, tronzadoras, cepilladoras, etc.
Fuente: prevention-world.com
