El lumbago o lumbalgia es un problema que se considera que todo ser humano puede presentar al menos una vez en su vida. De hecho se caracteriza por su alta prevalencia, reportándose estadísticas de hasta el 80% de la población en general.
En cerca del 90% de los casos no se encuentra ningún tipo de lesión que justifique la molestia, por lo que el problema será catalogado como lumbalgia mecánica o inespecífica. La lumbalgia tiene una gran trascendencia debido a sus grandes repercusiones económicas y sociales asociadas. Se ha convertido en una de las primeras causas de ausentismo laboral por incapacidad.
La lumbalgia se produce por la concurrencia de los factores que intervienen en la mecánica de la función del segmento lumbosacro de la columna vertebral. Este segmento es sometido a fuertes cargas mecánicas en todas las actividades que realizamos en nuestra vida diaria, desde el estar sentado o acostado o cepillarnos los dientes hasta la práctica de cualquier tipo de actividad física por más liviana que parezca.
Es muy importante tener en cuenta que las manifestaciones de la lumbalgia no se correlacionan con la gravedad o las causas de las mismas, de tal forma que puede haber casos con una gran intensidad del dolor en pacientes con mínimas lesiones y viceversa.
Puede afectar a gordos, delgados, altos, bajitos, hombres y mujeres. En los niños y adolescentes es menos común a menos que estos realicen actividades con sobrecargas físicas en este segmento. No hay deportes o actividades físicas exentas de este problema, por lo que la clave para prevenirla es mantener nuestro cuerpo en buen estado físico: peso adecuado, equilibrio muscular en el abdomen y los músculos de la espalda baja.
Así mismo es muy importante el cuidar las posturas en todas las actividades que desarrollamos. Los programas orientados al cuidado de la columna vertebral se denominan “higiene para columna” en los cuales se hace énfasis en la importancia de realizar movimientos en forma adecuada.
La lumbalgia se diferencia de la cíatica o ciatalgia porque en esta el dolor se localiza en la espalda baja y en la ciática el dolor se irradia hacia una o ambas piernas. Hay casos, sobre todo los crónicos, en que puede presentar en forma combinada.
¿Qué hacer cuando se presenta la lumbalgia?
Si la causa no fue un traumatismo, no es necesario tomarse radiografías de inmediato. Guardar la calma y acudir a consulta lo más pronto posible para iniciar el manejo del dolor, lo cual facilitara la movilización.
Otro dato a tener muy en cuenta es que, como norma general, está contraindicado el reposo absoluto ya que prolonga el periodo doloroso.
Por ello, la mejor recomendación es mantener el mayor grado de actividad física que el dolor permita y, si en algún caso eso significa verse obligado a hacer reposo en cama, éste deberá de ser lo más breve posible y durar un máximo de 2 días, ya que se estima que cada día de reposo en cama conlleva una pérdida del 2% de la potencia muscular.
Muchos atletas de diversas disciplinas han finalizado su carrera por problemas en la columna vertebral que inician con lumbalgia, así que no se debe de tomar este problema a la ligera, es necesario identificar la causa para tratar de corregirla en lo posible.
Fuente: laaficion.milenio.com
