1. ¿QUÉ SON?
Los gases del grupo helio están constituidos por el helio, neón, argón, kriptón, xenón y radón. Los métodos de producción son mediante separación criogénica. El radón se obtiene por separación de los gases liberados del radio.
En la tierra los más abundantes son el argón y el helio. La atmósfera constituye una fuente comercial de neón, argón, kriptón y xenón.
2. ¿DÓNDE SE UTILIZAN?
Uno de sus usos más importantes es en la fundición, afino y soldadura de metales, donde el helio y el argón juegan un importante papel en cuanto a proporcionar un “escudo” de gas inerte. También se utilizan mucho en operaciones criogénicas, donde el helio produce las temperaturas más bajas que se conocen, así mismo se usan en aviación militar y en cohetes (helio) y para su utilización en señales y lámparas fluorescentes (neón).
Se ha incrementado el uso de los laseres del helio-neón como sustitutos en las aplicaciones de alineación óptica, sobre todo en la industria de la construcción. Así mismo, se utilizan grandes cantidades de argón para la purga del monóxido de carbono durante la desgasificación en vacío de ciertos aceros de alta calidad.
El xenón es un anestésico efectivo.
4.¿QUÉ RIESGOS TIENEN?
En la actualidad, la única utilización de estos gases inertes durante los cuales se presentan efectos manifiestos es como anestésicos. A este respecto, el xenón supera a todos los demás del grupo e incluso a los óxidos nitrosos.
No se han observado efectos biológicos ni clínicos en el hombre como consecuencia de la inhalación continuada de mezclas de helio-oxígeno.
El helio, por razón de su mayor difusibilidad (peso atómico bajo) permite no solamente aumentar la profundidad hasta la cual pueden descender los buzos y mejorar considerablemente el trabajo a grandes profundidades, sino también reducir el tiempo de descompresión. Sin embargo, asociada con éstas ventajas tenemos la producción de una voz de tono alto y lo que es más importante, imposibilidad de entender las palabras. Este hecho constituye un grave problema en el caso de una emergencia. Dado que la adaptación a este efecto es muy escasa, incluso en los casos de exposición prolongada.
En la única aplicación en que se producen efectos biológicos manifiestos es como gas de respiración para buzos y trabajos subacuáticos marinos a gran profundidad. Las propiedades narcóticas del xenón son aproximadamente equivalentes a las del etileno. La narcosis inducida por los gases inertes está directamente relacionada con la presión de dicho gas, produciéndose una retención del monóxido de carbono en el cerebro, potenciando la narcosis.
4. ¿CÓMO SE PREVIENEN?
-Son peligrosos para la vista, por lo que se requiere en su uso la adecuada protección ocular.
-Si bien la exposición a estos gases no desarrolla efectos tóxicos graves, su uso, como en el caso del nitrógeno, puede, en determinadas circunstancias, estar asociado con atmósferas asfixiantes, y se han producido casos de muerte como consecuencia de fugas de argón de los equipos de soldadura colocados en espacios confinados.
-Siempre que se realicen operaciones de soldadura en espacios confinados deberá proporcionarse un buen suministro de aire fresco.