Los accidentes laborales descendieron más de 20% entre enero-abril de 2014 y el mismo período en 2016, según un informe de la consultora Ferrere, basada en datos del Banco de Seguros del Estado (BSE). La mejora se registró también en grupos de mayor siniestralidad como la industria de la construcción.
La disminución está emparentada a la aprobación en 2014 de un conjunto de normas vinculadas a la seguridad laboral (la más destacada de ellas, la ley de Responsabilidad Penal Empresarial), pero según Felipe Lasarte, abogado laboralista y coautor del informe junto a la abogada María Alonso, hubo más elementos en juego. Entre ellos, el aumento de desempleo –en particular en la construcción–, las mayores capacitaciones y mejores inversiones en equipamiento.
Sin considerar el desempleo, los restantes elementos que impulsaron el descenso de la siniestralidad laboral son consecuencia indirecta de la nueva normativa. Según explicó Lasarte a El Observador, la discusión en 2014 de la ley de Responsabilidad Penal Empresarial –a lo que se sumaron otros decretos posteriores en el mismo camino– ayudó a colocar el tema en la agenda y a elevarlo al nivel de prioridad para las empresas.
“Hubo en 2014 un cambio de paradigma. Más allá de la normativa, las empresas tomaron medidas y en la opinión pública se tomó otra dimensión del asunto”, explicó Lasarte.
Esa sucesión de normas que se implementaron fomentaron que las empresas incorporaran a su cultura el tema de la seguridad. “No solamente es comprar el extintor y ponerlo como te dice el ministerio (de Trabajo), sino que implica otras cosas que tienen que ver con habilidades blandas y concientización”, resumió el experto.
El caso de la construcción
En la industria de la construcción, que históricamente tuvo –junto al comercio– una importante participación en el total de los accidentes, se percibió un descenso aún mayor. Entre 2014 y 2016, la cantidad de accidentes disminuyó 35%, de acuerdo al trabajo de Ferrere.
De todos modos, el informe señala que debe tomarse en cuenta la importante pérdida de puestos de trabajo en esa industria en el último bienio.
“Comparando puestos promedios de 2014 y 2016 existió una reducción aproximada del 23% de la cantidad de trabajadores afectados a esta industria”, señala el texto. “Sin dudas hay una caída más allá del mayor desempleo”, aclaró Lasarte. Actualmente en la construcción se producen entre 300 y 500 accidentes por mes, la mayoría de ellos causados por esfuerzos físicos así como por caídas desde trabajos en altura.
Género
Se constata además una importante brecha entre la participación de hombres y mujeres en el total de los accidentes. Aproximadamente 73% de los accidentados son hombres, mientras que 26% son mujeres y el restante 1% no fue identificado.
Una posible explicación de ese fenómeno, estimó Lasarte, es la exposición de los hombres a tareas de mayor exigencia física. El esfuerzo físico excesivo es, de hecho, la principal causa de los accidentes de trabajo y, según las cifras del BSE, 25% de la siniestralidad está asociada a los trastornos músculo-esqueléticos.
Fuente: elobservador.com.uy
