BAILE
Se dice que la danza es la poesía del ejercicio. Un cuerpo mecido por la música es la mejor expresión de la armonía universal. Lo hará armonizar consigo mismo y se sentirá mejor, disminuyendo de esa manera las tensiones que produce estar estresado El bailarín que se entrega a la danza se libra de las ataduras del mundo terrenal para penetrar en la esfera de lo sublime.
Muchas personas se sienten bien y disminuyen su estrés si comienzan a bailar.
No necesitan realizarlo con una pareja, aunque si lo pueden hacer así, mejor. Pero si no, en la intimidad de su dormitorio, ponga música de su agrado y póngase a bailar para usted solo.
No tenga miedo de hacer el ridículo, usted está solo. Haga los movimientos del cuerpo como le plazca, sin preocuparse de si están bien o mal.
Conviene, de todos modos, evitar música estridente o con muchos agudos y letras altisonantes.
La danza es un trabajo físico y espiritual que reporta innumerables beneficios al que la practica. No importa si usted sabe bailar, importa que se mueva en la forma que lo sienta.
También hay quien toma clases de baile, tango, folklore, etc.
Lo ayudará a ocupar la mente en algo diferente a los problemas cotidianos y es un excelente ejercicio para realizar cuando uno está estresado.
BAÑO
Bañarse, eso que uno hace como mero ritual de limpieza, puede transformarse en un hábito deliciosamente relajante.
Ponga en su baño música apropiada para relajación, que sea sedante, y disfrute de un baño de inmersión con distintas fragancias.
Tal vez pueda prender un vela, y apagar la luz, lo que le dará un toque diferente a su baño.
Además, lo disfrutará con todos sus sentidos.
BICICLETA
Salir a andar en bicicleta es un excelente ejercicio antiestrés, ya que se utilizan casi todos los músculos del cuerpo. Ello produce una paulatina relajación muscular que, por supuesto, es muy beneficiosa para el cuerpo.
Trate siempre de buscar espacios abiertos con mucho sol y árboles, de esa manera también estará en contacto con la naturaleza, lo que de por sí, ya es positivo.
RALPH MELVILLE
BUENOS HÁBITOS
Los buenos hábitos de trabajo hacen disminuir el estrés. Por ejemplo:
-Despeje de su escritorio o lugar de trabajo todo lo que no se refiera al tema que está tratando. El sólo hecho de ver expedientes, desorden u otros temas que usted sabe que debe resolver, hace que se sienta nervioso y aumente su tensión.
Por lo tanto, sólo ponga atención en lo que debe realizar en forma más urgente o importante.
-Haga las cosas de acuerdo con un orden de importancia previamente establecido. Comience el día realizando las tareas más importantes o que más le debe prestar atención. En horas de la mañana estará más descansado y podrá rendir mejor. Cuando uno se saca un problema de encima, se pone mejor de buen ánimo y se siente con confianza para enfrentar los siguientes.
-Aprenda a planear, organizar, delegar e inspeccione lo delegado.
-El desorden nos hace perder el tiempo y genera más estrés que cualquier otra causa.
-La habilidad de organizar puede aprenderse. Comience a pensar qué quiere lograr y en qué tiempo y determine cómo hacer las tareas de la manera más eficiente.
-Establezca plazos y respételos.
-Despiértese con tiempo para disfrutar de una ducha, un buen desayuno y un rato de tranquilidad antes de ir a trabajar.
-Antes de comenzar el día, permanezca en silencio consigo mismo, respirando pausadamente o escuchando música.
-Cuando pueda, tome una breve siesta, de 20 a 30 minutos.
-Cuando menor sea su dosis diaria de televisión, mayor será su capacidad de resolver el estrés.