En el caso se investiga la existencia de talleres textiles clandestinos y alojamientos en donde vivían y trabajaban varias personas de nacionalidad boliviana, quienes realizaban prendas de vestir de marca “Mine”. La causa se inició el día 31 de mayo del 2011, a raíz de las actuaciones realizadas por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) que comenzaron a partir de una denuncia hecha ante ese organismo, donde se hizo saber que en el inmueble ubicado en la calle San Nicolás 1597 funcionaría un taller textil clandestino.
En función de la información obtenida, el pasado miércoles se ordenaron los allanamientos de las tres viviendas mencionadas, procedimientos a los que asistió personal de la Dirección Nacional de Migraciones, del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento de las Personas Damnificadas por el Delito de Trata, de la Subsecretaría de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural del área de Trata de Personas del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, de la Dirección de Fiscalización dependiente de la Dirección de Habilitaciones y Permisos del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
En el allanamiento del taller ubicado en Calderón de la Barca 1666, personal de la Policía se encontró con el encargado del lugar, Freddy Barco Charaldy, en donde estaban trabajando siete personas de nacionalidad boliviana, algunas en condiciones migratorias irregulares. Asimismo, en una de las paredes del lugar había un mueble que tapaba un pasadizo por medio del cual se accedía a habitaciones, donde vivían las personas que trabajaban allí. En el momento se encontraba una persona operada y otra menor de edad. Este pasadizo era por el único lugar al que se podía acceder a esas habitaciones, puesto que no tenía puerta de acceso ni ventanas.
Del taller, que no tenía condiciones de higiene y seguridad y que ya había sido clausurado el año anterior, se secuestraron 35 máquinas de coser y una gran cantidad de prendas de vestir confeccionadas en el taller (1168) y otras tantas en confección. También se detuvo al encargado del lugar y, con la intervención del Gobierno de la Ciudad y Nación, se dio asilo a las personas que allí se encontraban, pues el taller fue nuevamente clausurado, agregó el CIJ.
LATAM: Reporte (drm) UPI.com
